Panorámica de Villanueva de Sijena, villa invitada en FERMA 2021.

La villa monegrina participará en el certamen barbastrense con una exposición promocional de su patrimonio histórico y artístico

 

20 de agosto de 2021. Desarrollo

Villanueva de Sijena será la villa invitada en la sexagésima edición de FERMA, la Feria Regional de Barbastro, en reconocimiento a este municipio por su reivindicación histórica para la devolución de los bienes, un nexo que es común con la capital del Somontano.

Como invitada al certamen, la villa monegrina participará en FERMA 2021 con una exposición promocional que se ubicará en el hall del Multiusos del Centro de Congresos de Barbastro, en la que promocionará su magnífico patrimonio histórico y artístico.

La muestra, que se inaugurará el próximo 28 de agosto con presencia de una representación de Villanueva de Sijena encabezada por su alcalde, permitirá a barbastrenses y visitantes acercarse al rico patrimonio que atesora Villanueva de Sijena, en el que destaca el Real Monasterio de Santa María de Sijena, declarado Monumento Nacional y Bien de Interés Cultural, y la casa natal de Miguel Servet.

La exposición podrá visitarse en el Centro de Congresos del 28 de agosto al 24 de septiembre, en horario de 18 a 20 horas de lunes a sábados.

 

Historia y patrimonio

Villanueva de Sijena nace a raiz de la decisión de los Reyes de Aragón, Alfonso II ‘El Casto’ y Doña Sancha, de construir el nuevo Monasterio de Santa María Reina en un lugar cercano al río Alcanadre, donde ya se alzaban dos pequeñas poblaciones denominadas Sixena y Urgellet, de unos 180 y 250 habitantes, respectivamente. Estos pobladores debieron establecerse en la vega del río Alcanadre en tiempos de Alfonso I el Batallador, poco después de la conquista del territorio controlado por los musulmanes, que tuvieron que trasladarse a un nuevo emplazamiento aunque cercano y que fue llamado Villanueva de Sijena.

Monasterio Villanueva de SijenaEl Real Monasterio de Santa María de Sijena, de estilo románico de transición, fue fundado en 1188 por voluntad y deseo de la reina Doña Sancha. Se levantó en pleno desierto este solemne y descomunal cenobio femenino que se convirtió en uno de los monasterios más ricos y bellos de Aragón gracias a los importantes donativos que recibió. Acogió tras sus muros a un buen número de reinas y princesas, así como hijas de familias nobles del reino y de la Corona de Aragón. Sirvió de depósito de una parte del tesoro real y como archivo monástico entre los siglos XIII y XIV. Fue también panteón real sirviendo de lugar de enterramiento de reyes, reinas e infantas de Aragón, destacando la sepultura de la reina doña Sancha o la de Pedro II, único monarca de la Corona de Aragón enterrado en Aragón.


Siendo priora Doña Blanca de Aragón y Anjou, hija de Jaime II, se convirtió en uno de los más magnificentes cenobios de la Orden de San Juan de Jerusalén en Europa. Entre sus palaciegas estancias destacaba la Sala Capitular, decorada con ricos frescos medievales.

En 1923 fue declarado Monumento Nacional por Real Orden de 28 de marzo de la Dirección General de Bellas Artes. Su declaración como Bien de Interés Cultural por el Gobierno de Aragón fue completada en abril de 2002.

OLYMPUS DIGITAL CAMERAConserva la estructura de la sala capitular, antiguamente decorada con frescos más bellos del románico tardío. La impresionante portada románica con catorce arquivoltas de medio punto se ha convertido en símbolo del patrimonio cultural de los Monegros.

Entre 1983 y 1994 la Orden de San Juan de Jerusalén vendió a la Generalitat de Cataluña una serie de bienes de gran valor artístico sin el permiso de las autoridades patrimoniales. Tras un largo litigio para su recuperación, la gran mayoría de las piezas fueron devueltas y regresaron a Aragón entre 2016 y 2017, aunque todavía queda pendiente la devolución de las pinturas románicas de la Sala Capitular. Las piezas devueltas se encuentran expuestas en los antiguos dormitorios del monasterio y pueden visitarse los viernes, sábados y domingos a través de las visitas guiadas organizadas por Turismo de Aragón.

Villanueva de Sijena es también conocido por ser el lugar de nacimiento del teólogo heterodoxo y científico Miguel Servet (1511-1553). Desde 2002, existe un Centro de Interpretación en la casa familiar restaurada, que es sede también del Instituto de Estudios Sijenenses Miguel Servet.

Entre el patrimonio artístico del municipio destaca también la Iglesia de Santo Domingo y el Salvador, ubicada en la plaza de España, de estilo gótico tardío, que fue construida en sillar y sillarejo y consta de nave única, cubierta con bóvedas estrelladas. A la entrada, en el pequeño jardín que adorna su exterior, se alza la escultura de Miguel Servet, erigida por sus paisanos en señal de homenaje.

Villanueva de Sijena ostenta el título de Villa por Decreto de la Presidencia del Gobierno del día 22 de septiembre de 1931, en méritos a haber nacido en ella el sabio Miguel Serveto Conesa.

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