Se ha iniciado el tratamiento biológico para controlar las plagas del “tigre del plátano”, la “psila del cercis” y el “pulgón negro”
27 de mayo de 2021. Servicios Urbanos e Infraestructuras
El Ayuntamiento de Barbastro, a través del Área de Servicios Urbanos e Infraestructuras que preside Raquel Salas, ha comenzado los tratamientos biológicos para controlar las principales plagas que sufren algunos árboles situados en distintos puntos de la ciudad. La empresa Fitoaragón es la encargada de realizar estos tratamientos para el control de la “Corythucha ciliata” o “tigre del plátano” que afecta a los plataneros; el “pulgón negro” que incide en las acacias y en las catalpas; y la “psila del Cercis”, que afecta al árbol del amor.
La semana pasada se comenzó el tratamiento de un total de 135 plataneros situados en el Paseo del Coso, plaza Aragón, avenida San Josemaría Escriva de Balaguer, avenida del Cinca, avenida de los Pirineos y calle Juan de Lanuza, para controlar la plaga del “tigre del plátano”, un insecto chupador procedente de Norteamérica que se alimenta de la savia de los árboles y que desde hace unas décadas es una plaga habitual de los plataneros en el continente europeo y puede desarrollar hasta tres generaciones al año.
Como en anteriores campañas, el tratamiento elegido es biológico, una opción más ecológica. En este caso consiste en la liberación en los árboles afectados de organismos vivos, en este caso el “anthocoris nemoralis”, un insecto depredador que ayuda a disminuir la presencia del “tigre del plátano” y, con ello, reducir su impacto en los árboles afectados. Este año se ha comenzado con una dosis baja, dado que se ha empezado a actuar al principio de la plaga y la suelta va a ser moderada, con seguimiento semanal o cada dos semanas para poder controlar la afección desde sus primeros estadios.
Asimismo, también se ha comenzado con el tratamiento de otros 61 ejemplares, en este caso ‘Cercis siliquastrum’ o árboles del amor situados en las calles El Terrero y George Orwell-Camino Baldorrias, afectados por la “psila del cercis”. Para controlar la plaga de este insecto chupador, también se utiliza un tratamiento biológico, en este caso con la suelta de “anthocoris nemoralis”, un insecto depredador que ayuda a disminuir la presencia de la plaga.
Otra de las acciones se está desarrollando es en las once acacias situadas en la plaza del Ferrocarril y en las seis catalpas de la calle del Castillo, especies arbóreas afectadas por el “pulgón negro”, otro insecto chupador que se alimenta de la savia de los árboles. En este caso, el tratamiento se está realizando con la suelta de “adalias” o mariquitas, complementado con un parasitoide “aphidius colemani”.