Barbastro, 20 de junio de 2024 La ciudad de Barbastro es centro de servicios y motor económico y de innovación de una extensa comarca y, para reafirmarse como tal, tres instituciones (el Ayuntamiento de la ciudad -y, más en concreto, su Área de Desarrollo-, la Asociación de Empresarios del Valle del Cinca y el Centro de Empresas e Innovación CEEI Aragón) unen esfuerzos. Representantes de las tres entidades se han reunido esta semana en la capital del Somontano para activar un nuevo modelo de colaboración en el que los proyectos serán los protagonistas y en el que cada empresa o profesional que disponga de una idea de negocio encontrará los recursos que necesite.
“Por suerte, Barbastro y El Somontano son tierra de innovadores capaces de convertir sus ideas y proyectos en negocios de éxito capaces de generar riqueza y empleo, pero muchas veces se precisa de apoyo externo. Ahora, Ayuntamiento, CEEI y Asociación de Empresarios vamos a ofrecer ese apoyo y será gracias, primero, al nuevo sistema de trabajo que impulsa el CEEI y, segundo, a la voluntad que la Asociación de Empresarios del Polígono tiene de convertirse en un agente todavía más activo dentro de la economía local”, explica Silvia Ramírez, la concejal de Desarrollo.
Con sedes en Zaragoza, Huesca y Teruel y fundado en enero de 1992, el CEEI nació como una incubadora de empresas dispuesta a apoyar la creación de empresas innovadoras en el ámbito industrial o de servicios. Su director gerente, Javier Martínez y su responsable en Huesca, Beatriz Lorente, se han reunido esta semana en las dependencias de la Asociación de Empresarios del Polígono Valle del Cinca con Adrián Beroz, presidente de la entidad, Esteban Planes, tesorero de la misma, y Silvia Ramírez, la concejal de Desarrollo. “Nos dieron a conocer sus planes inmediatos, que pasan por ponerse a disposición en cada territorio de las empresas y profesionales que tienen proyectos en cartera, implicarse en su desarrollo y ofrecerles los servicios que precisen, pero no en forma de asesoramiento, sino con una aportación económica ejecutiva. Lo que plantean es un cambio de concepto: no se trata de ofrecer acompañamiento o asesoría, se trata de activar una implicación real, incluso con capital si es necesario, porque si los proyectos se convierten en negocios de éxito, las cantidades que se inviertan acabarán beneficiando a toda la comunidad”, explica la concejal.